Recoge tu maleta y ven conmigo.
Te llevaré al lugar más hermoso que jamás ha existido.
Te vendare los ojos durante el camino.
Y cuando lleguemos susurraré en tu oído, lo más bonito que jamás te han dicho.
Acariciaré tu cara, como si fuera de cristal, tan frágil, tan hermosa.
Besaré tus labios y haré que el tiempo se pare.
Te juro princesa, que este sueño, es el mejor de los sueños soñados.
Despertaré a tu lado, te miraré hasta que tus ojos se habrán, y te diré:
BUENOS DÍAS PRINCESA.
Te haré sentir la mujer más FELIZ del mundo.
M.
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